Quien suele visitar el Templo de Salomón de la Iglesia Universal del Reino de Dios para participar en las reuniones que se realizan en su interior, ya se ha encontrado con hombres y mujeres que visten trajes típicos de la Biblia. Si en el pasado las levitas, una de las tribus de Israel descendiente de Leví, eran considerados hombres de espiritualidad elevada y, por eso, designados para realizar los servicios sagrados en el Tabernáculo y en el Templo, hoy su función en el Santuario de Brás no es muy distinto.
Se caracterizan por traer la misma indumentaria característica, ellos están presentes desde la puerta de entrada del Santuario. Ayudan a los obispos durante las reuniones para que todo funcione correctamente. Son discretos y tienen la responsabilidad de preparar el Templo para acoger y atender a cada visitante que visita el lugar. Así como los obreros, ellos son los responsables de ayudar a las personas que buscan soluciones a sus problemas y dirigirlas dentro del Santuario.
Preparados y comprometidos con la Obra de Dios y la Iglesia Universal del Reino de Dios, los levitas están presentes en distintas zonas del Santuario. De vez en cuando, ellos son consagrados. Es el momento en que sus fuerzas son renovadas para que sigan desempeñando esas tareas de gran responsabilidad y tan necesaria en el Templo.
En la noche del pasado día 30 de mayo, durante la reunión de los miércoles, realizada por el Obispo Renato Cardoso, en el Templo de Salomón, se produjo la consagración de los levitas. El evento contó con la presencia de varios obispos, entre ellos el obispo Carlos Cucato, responsable de ellos, y el obispo Santana, escogido para acompañar a los miembros del Templo.
A continuación, el Obispo Renato mostró el broche que estaba usando y detalló cómo se miembro: “el Templo de Salomón es visitado por muchas personas todos los días. Pero hay también las que abrazaron ese lugar como iglesia. Aquí, rezan, dan sus diezmos, presentan al hijo y se casan. Si alguien ha venido aquí pero no es miembro del Templo, entonces debe buscar al Obispo Santana. Él podrá explicar cuáles son los criterios para ser consagrado y recibir ese broche como señal de su decisión”.
Antes de consagra a los levitas, el obispo de la Iglesia Universal del Reino de Dios Renato Cardoso, explicó a los miembros y visitantes la importancia que tiene el trabajo que realizan: “Los levitas son personas escogidas, no solo para organizar el Templo sino principalmente para prestar asistencia espiritual a todos. Son miles de personas las que hay que atender. Somos pocos los obispos para todas las personas que vienen y ellos dividen esa responsabilidad con nosotros. Normalmente, ellos rezan por todos. Hoy es el día en el que nosotros rezamos por ellos”.
El empresario Francisco Sinézio da Silva, de 62 años, está entre los 500 levitas que fueron consagrados. Él desempeña esa función desde que se inauguró el Templo y ya ha participado en otros eventos como este. Para él, fue un momento único “No tengo duda de que esa experiencia extraordinaria y distinta. Nos sentimos valorados por lo que el Obispo Renato dijo. Esta consagración ha traído para nosotros mayor unción no solo como levitas, sino como personas. Por donde pasamos, tenemos que ser seres de luz del mundo, pues es una batalla espiritual y nosotros tenemos que ser renovados. La consagración ha servido para unirse más aún para que podamos hacer cada vez mejor el trabajo que se realiza en el Templo para entender las necesidades de las personas, sobre todo en la fe, para que su historia sea reescrita a los ojos de Dios”.
Sé el primero en comentar