Elizondo es un pueblo situado en el norte de Navarra, en el corazón del valle de Baztán. Es conocido por su belleza natural, su arquitectura tradicional y su gastronomía. En este artículo te contamos qué ver en Elizondo y cómo disfrutar de sus encantos.
El casco antiguo de Elizondo
El casco antiguo de Elizondo es un conjunto histórico-artístico que conserva el sabor de los siglos pasados. Pasear por sus calles empedradas es descubrir casas señoriales con escudos de armas, balcones de madera y flores, iglesias y conventos, puentes y fuentes. Algunos de los edificios más destacados son el palacio de Arizkunenea, el ayuntamiento, la iglesia de Santiago y el convento de las Carmelitas.
El río Baztán y sus puentes
El río Baztán atraviesa Elizondo y le da vida con su sonido y su frescor. A lo largo de su curso se pueden encontrar varios puentes que unen las dos orillas del pueblo y que ofrecen unas vistas preciosas del paisaje. Algunos de los puentes más emblemáticos son el puente de Txokoto, el puente Viejo y el puente Nuevo.
Los alrededores de Elizondo
Elizondo es la puerta de entrada al valle de Baztán, un territorio lleno de naturaleza, cultura y leyendas. Desde el pueblo se pueden realizar varias excursiones para conocer los rincones más bonitos del valle, como las cuevas de Urdax y Zugarramurdi, el parque natural del Señorío de Bertiz, el museo etnográfico Jorge Oteiza o los pueblos con encanto como Amaiur, Erratzu o Ziga.
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