Las newsletter suponen una fidelización a la marca, es una forma de comunicación gratuita para nuestros posibles clientes y no es costosa
Muchas veces habrás visto (y recibido) algunas ‘Newsletter’, y seguramente te habrás preguntado qué diferencias y parecidos existen entre este tipo de emails y los correos comerciales. En primer lugar, seguramente a estas alturas ya tendrás claro que una Newsletter está bien diseñada y cuidada y no es un correo con unas líneas enviado de cualquier manera.
Bien, una Newsletter es una comunicación para fidelizar a la marca con contenidos de interés, es más bien un boletín de noticias que una promoción comercial, aunque no existe una línea roja que los distinga al 100%. Pero el objetivo, que sigue siendo vender y promocionar una marcha o un producto es el mismo.
Las herramientas para hacer nuestras propias newsletter gratis y siempre de calidad pueden ser las mismas que las existentes para los correos comerciales o mailing marketing, y hay muchas en el mercado.
Otro aspecto es que en las Newsletter se cuida mucho (además del diseño y el target tipo al que nos dirigimos) la redacción del propio boletín. Conviene incluso pensar previamente un nombre sugerente para nuestra newsletter y que, a ser posible, se identifique al máximo con nuestra marca. Si tenemos en la empresa un departamento de comunicación hay que coordinarlo con ellos, porque no todo es márketing y ventas. En el caso de empresas pequeñas es más complicado porque los recursos no dan para todo, pero si lo hacemos bien podemos conseguir una fidelidad a nuestra marca, o producto tremendamente eficaz y de una forma muy económica.
La periodicidad es otro elemento que distingue a las newsletter del email marketing porque en este caso ya lo fijamos previamente y siempre con carácter semanal, cada quince días o cada mes, siendo una muy buena característica de estos mensajes. Junto a ello, las newsletter son perfectos mensajes resumidos y compactados que podemos compartir en las redes sociales de la empresa o con nuestros contactos personales sin que nos pongan en la lista negra de spameadores por WhatsApp.
Claro está que tenemos que conseguir previamente una buena base de datos de clientes a quienes les pueda interesar nuestro boletín de noticias. Si disponemos de una web, una solución fácil es incluir una pestaña para que los visitantes soliciten la inscripción. Pero incluso con métodos mucho más rudimentarios como preguntar directamente a nuestros clientes si nos pueden facilitar su email para que les informemos de posibles ofertas, promociones y noticias podremos conseguir óptimos beneficios.
En definitiva, las newsletter son una gran ventaja que no debemos desdeñar porque supone una fidelización a la marca, nos diferencian de la competencia ante los posibles clientes, y además no es costosa. Debemos incluir las newsletter como un canal más de comunicación con el cliente que se sentirá ‘Premium’ si le aportamos a estos boletines un valor añadido a su experiencia global y eso, hoy en día, puede decantar a nuestro favor muchas decisiones de compra de los consumidores.