Esta actividad ilegal provoca un importante impacto ambiental y supone un riesgo para la seguridad de otros usuarios de los espacios naturales
Además del impacto visual, estas rodadas ocasionan importantes problemas de erosión y la formación de pequeños barrancos o grietas, y destruyen la vegetación natural existente que tiene poca posibilidad de regenerarse a medio plazo al ser, generalmente, matorrales de suelos singulares y con problemas de regeneración.
Por este motivo, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente trabaja intensamente para acabar con esta práctica, que se ha incrementado por el tránsito de motos de motocross (cuyo uso está restringido a circuitos) y quads en zonas y vías no autorizadas, y solicita la colaboración ciudadana ante el grave impacto ambiental que genera.
Los vehículos con mayor presencia son las motos de motocross o enduro, que convierten determinados enclaves de La Rioja en circuitos ilegales y circulan por espacios prohibidos para este tipo de vehículos, provocando importantes agresiones en el medio ambiente, la fauna y también las infraestructuras.
En La Rioja hay numerosas zonas y montes visiblemente afectados, pero quizás donde se registra un mayor tránsito de este tipo de vehículos es en los términos municipales de Lagunilla de Jubera, Clavijo, Ribafrecha, Nalda, Aguilar del Río Alhama,o Calahorra…; si bien en el resto de la comunidad también se producen y provocan daños notables e irreparables. El paso frecuente por estas zonas, unido al pronunciado desnivel del terreno hace que se formen erosiones importantes que en la mayoría de los casos generan cárcavas que se acentúan, se hacen más profundas y anchas con las lluvias, y se evidencia una pérdida de suelo fértil.
La erosión del terreno es uno de los mayores problemas ambientales que ocasiona esta práctica, pero también se producen destrozos en senderos y sobre la vegetación del entorno, sin pasar por alto la contaminación acústica que generan las motocicletas. Además, afecta al normal desarrollo de la fauna y puede poner en riesgo la seguridad de personas que puedan estar realizando actividades como senderismo, caza o cualquier otro aprovechamiento forestal autorizado.
Sensibilización social
Con el buen tiempo aumenta el número de motoristas que salen al campo para llevar a cabo esta práctica ilegal, y la cifra se incrementa especialmente los fines de semana.
Desde la Dirección General de Medio Natural se apela a la responsabilidad social y la colaboración ciudadana para terminar con estos actos vandálicos que suponen la destrucción de un patrimonio común como son los montes, hábitat de riqueza natural que pertenece a todos los riojanos.
Sanciones y normativa aplicable
Durante 2017, la Dirección General de Medio Natural tramitó más de 70 denuncias por circular con vehículo motorizado tanto campo a través, ya sea por cortafuegos o sendas peatonales o de ganado, como por pista de uso restringido.
La Ley 2/95, de 10 de febrero de Protección y Desarrollo del Patrimonio Forestal de La Rioja, en su artículo 76, pone los principios normativos en este asunto y es muy clara al respecto: «quedan prohibidas las actividades motorizadas de carácter recreativo, deportivo o lúdico que se realicen campo a través».
Por su parte, la citada ley establece sanciones en cuantías que pueden oscilar de 100 a 1.000 euros y tienen calificación de leve. Cuando en estas infracciones concurren otras acciones como la falta de colaboración, y la obstrucción o resistencia a los Agentes Forestales, la infracción tiene la calificación de grave, con sanciones cuyas cuantías oscilan de 1.001 a 100.000 euros.