Aritz Romeo Ruiz, profesor de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) e investigador en su Instituto de Smart Cities (ISC), ha escrito un libro, de reciente publicación, en el que aborda el estudio del régimen jurídico de los caminos naturales y las vías verdes, temática no abordada por la bibliografía jurídica desde el año 2000. La obra, titulada “Caminos naturales: funciones, régimen jurídico e inteligencia artificial. Especial consideración del caso de Navarra y de la Vía Verde del Plazaola”, plantea la necesidad de aprobar una Ley Foral de Caminos Públicos, Vías Pecuarias e Itinerarios Verdes en la Comunidad Foral para “dotar de seguridad jurídica a las entidades gestoras y las personas usuarias” de estas vías para superar “la atomizada y dispersa” regulación actual.
Navarra goza de una competencia de naturaleza foral o histórica en materia de caminos cuyo trazado transcurra íntegramente por el territorio de la Comunidad Foral, que se remonta, al menos, a los siglos XVII y XVIII, y que tiene su fundamento actual en el artículo 49 de la LORAFNA (Ley Orgánica de Reintegración y Amejoramiento del Régimen Foral de Navarra). Sin embargo, no cuenta con una norma jurídica que regule el fenómeno viario, al margen de la Ley Foral de Carreteras o de la Ley Foral de Vías Pecuarias. Por ello, presenta “una regulación atomizada y dispersa en diferentes instrumentos de diversa naturaleza jurídica”, según el autor de la obra, publicada por la editorial valenciana Tirant Lo Blanch.
“Consecuencia de ello es la falta de seguridad jurídica con que se encuentran las entidades gestoras de las vías verdes de Navarra, así como las personas usuarias —describe Aritz Romeo—. En el caso de la Vía Verde del Plazaola, las pequeñas actuaciones de mantenimiento las realizan las entidades locales, pese a carecer de una base jurídica, como podría ser un convenio, cuando la competencia para el mantenimiento es del Gobierno de Navarra como administración titular del trazado”.
De ahí la necesidad, a su juicio, de una Ley Foral de Caminos Públicos, Vías Pecuarias e Itinerarios Verdes, que “regule el fenómeno viario de manera global, y recoja en un mismo corpus legislativo la regulación de cada uno de los distintos tipos de vías —con excepción de las carreteras, que tienen otra consideración—, y que esté orientada a la creación de una red o sistema de caminos de Navarra que permita una mejor experiencia a las personas usuarias y dote de seguridad jurídica a los operadores, gestores, administraciones y personas usuarias”.
La monografía también aborda la evolución que los caminos naturales han experimentado desde el punto de vista de sus funciones. “Nacieron como un recurso turístico unido al desarrollo sostenible del ámbito rural, han pasado a formar parte de la infraestructura verde y cumplen hoy en día con funciones desde el punto de vista ambiental, ya que son una herramienta que juega su papel en las políticas de mitigación y adaptación al cambio climático”, indica el autor.
Desde su punto de vista, las administraciones deben “fomentar la construcción y el uso de este tipo de infraestructura viaria no motorizada, pues es un elemento necesario para el impulso de la movilidad sostenible y la reducción de los gases de efecto invernadero, de acuerdo, entre otros instrumentos, con la Estrategia Europea de la Biodiversidad 2030 y la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y Conectividad y Restauración Ecológica, así como con la recién aprobada Ley Europea de Restauración de la Naturaleza”.
El libro plantea también cómo la inteligencia artificial puede contribuir a mejorar las funciones ambientales de los caminos naturales, así como a su desarrollo como infraestructura para la movilidad sostenible. Posibles aplicaciones de la inteligencia artificial serían, por ejemplo, sistemas de monitoreo ambiental, gestión de rutas o mantenimiento predictivo de infraestructuras.
El investigador resalta que el marco regulatorio sobre esta materia es “incipiente y viene determinado, fundamentalmente, por el Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial, que ha sido aprobado en fechas recientes”. Según Aritz Romeo, “la nueva regulación europea desarrolla un enfoque basado en el riesgo”. Esto significa que el reglamento clasifica los sistemas de inteligencia artificial dependiendo del nivel de riesgo que representa para los derechos y libertades de las personas y que oscila entre bajo o mínimo y alto. Las exigencias regulatorias aumentan con el nivel de riesgo.
“En virtud de los sistemas de inteligencia artificial que se utilicen en los caminos rurales y su posible afección a los derechos fundamentales, deberán cumplirse los requerimientos del citado reglamento, que se dan en diferentes intensidades, si bien, lo previsible es que los sistemas de inteligencia artificial que puedan usarse en esta materia sean, en principio, de riesgo limitado”, señala el autor.
Esta obra ha sido publicada en el marco de dos proyectos de investigación: uno, de personas jóvenes investigadoras sobre datos, Derecho Administrativo e inteligencia artificial, cuyo investigador principal ha sido el propio Aritz Romeo; y otro, perteneciente a la convocatoria Retos del Conocimiento del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y la Agencia Estatal de Investigación sobre biometría, Derecho Administrativo y datos, cuyo investigador principal es el catedrático Martín Razquin Lizarraga. A su vez, parte de la monografía está inspirada en un dictamen que realizó el profesor Romeo por encargo del Consorcio Turístico de la Vía Verde del Plazaola.
El autor de la obra, Aritz Romeo Ruiz, es profesor contratado doctor de Derecho Administrativo. Tras licenciarse en Derecho en la UPNA, cursó sucesivamente el Máster Universitario en Investigación en Ciencias Jurídicas en la Universidad de Deusto y el doctorado en Derecho en la UPNA. Sus principales líneas de investigación son el derecho local, la contratación pública estratégica, la inteligencia artificial en la actividad de las administraciones públicas y el derecho ambiental, materias sobre las que ha escrito varias publicaciones, entre ellas, dos monografías.
Aritz Romeo, quien fue abogado ejerciente del Colegio de Abogados de Pamplona entre 2006 y 2020, ha realizado estancias de investigación en la Universidad de Lisboa (Portugal) y en el Centro de Documentación e Investigación Europeas de la Universidad de Pau y de los Países del Adour (Francia).
Además de su labor docente e investigadora, ocupa desde 2020 un cargo de gestión: es secretario académico de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la UPNA.