Quince municipios de la Ribera se beneficiarán de una subvención de 3.550.439 euros, concedida en la segunda convocatoria del PERTE para la digitalización del ciclo del agua. El proyecto, liderado por la sociedad pública NILSA, adscrita al Departamento de Cohesión Territorial, ha sido seleccionado entre numerosas propuestas presentadas a nivel nacional, y se financiará con los fondos Next Generation de la Unión Europea.
El proyecto, denominado Agua Digital Ribera de Navarra (ADNRa), incluye actuaciones en los municipios de Tudela, Fontellas, Cabanillas, Fustiñana, Castejón, Corella, Barillas, Ablitas, Monteagudo, Tulebras, Murchante, Ribaforada, Buñuel, Valtierra y Arguedas. Estas localidades se agrupan a través de la Junta Municipal de Aguas de Tudela, la Mancomunidad de Aguas del Moncayo o, de forma directa, con sus respectivas alcaldías.
En la presentación de esta mañana, el director general de Administración Local y Despoblación, Jesús Mari Rodríguez, ha explicado que “este PERTE pone en marcha un modelo de gobernanza de cuatro entidades que gestionan agua en alta y que integra a 15 municipios. Queremos que sirva como germen para llegar al Canal de Navarra, ya que esta es una infraestructura muy importante que, cuando llegue, va a cambiar el modelo de gobernanza en materia de agua de la Ribera, aportando más cantidad de agua y de mayor calidad y que va a servir, de alguna manera, para interconectar todos los sistemas de abastecimiento que ahora mismo existen en la Ribera”. Durante su intervención, el director general, además, ha subrayado que “este PERTE tiene que ser un objetivo en sí mismo: fortalecer, dar más robustez y resiliencia al abastecimiento de agua que ahora tiene esta zona de navarra, y eso pasa por la digitalización y también por la llegada del Canal de Navarra”.
En la presentación también han participado el gerente de NILSA, Fernando Mendoza; el presidente de la Mancomunidad de Aguas del Moncayo, Tirso Calvo; además de la Junta Municipal de Aguas de Tudela, los alcaldes de Valtierra y Arguedas; y el concejal de urbanismo de Fustiñana.
El proyecto, que prevé la ejecución de las actuaciones hasta junio de 2026, tiene como objetivo mejorar la gobernanza del ciclo integral del agua en la Ribera, fomentando la eficiencia y la sensibilización de la población sobre las buenas prácticas del uso del agua, dentro de un marco de adaptación y mitigación al cambio climático. La digitalización de los procesos será el eje central de las intervenciones, entre las que destacan planes de emergencia ante sequía; protocolos de vigilancia y gestión de calidad del agua de consumo; planes de gestión integral de saneamiento; fomento del uso de agua regenerada; planes de protección civil frente a inundaciones; estudios de fugas y eficiencia; infraestructuras de captación, abastecimiento y depuración; implementación de sistemas energéticos más eficientes; o desarrollo de herramientas digitales y de comunicación.
Este nuevo éxito se suma a la primera convocatoria del PERTE del agua, en la que Navarra también fue seleccionada a través del proyecto Agua Digital Navarra (ADNa), liderado por NILSA, que logró una subvención de 7,99 millones de euros. En esa ocasión, participaron las mancomunidades de Montejurra y de la Comarca de Pamplona.
Colaboración interinstitucional y compromiso con el territorio
El Gobierno de Navarra sigue comprometido con la captación de fondos europeos y la colaboración con las entidades locales para promover un uso responsable y eficiente de los recursos hídricos, clave para afrontar los retos del futuro.
Este esfuerzo refuerza la apuesta del Ejecutivo foral por la modernización y la digitalización, claves para la eficiencia y la sostenibilidad en la gestión del agua, contribuyendo así a un desarrollo económico y social más resiliente.
El director general, tercero por la izquierda, con el resto de participantes en el acto.