El Gobierno de España ha presentado este martes, tras la reunión del Consejo de Ministros, el esperado informe sobre las causas del apagón eléctrico del pasado 28 de abril. La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, ha explicado que la crisis energética tuvo un origen «multifactorial», resultado de una serie de factores encadenados que provocaron el colapso del sistema eléctrico a las 12:33 horas de aquel domingo.
Según ha detallado Aagesen, el comité de investigación —compuesto por más de 75 expertos de distintos ministerios y organismos— ha descartado que el fallo se debiera a un ciberataque. «Ha sido la mayor investigación en materia de ciberseguridad llevada a cabo en nuestro país», ha remarcado, para añadir que sí se han detectado «vulnerabilidades y malas configuraciones» que requieren medidas preventivas.
El informe, aprobado por el Consejo de Seguridad Nacional y disponible desde hoy para la ciudadanía, recoge un análisis cronológico dividido en cinco fases, desde las primeras señales de inestabilidad hasta la desconexión total y la posterior recuperación del suministro. Entre los datos revelados, destaca que ya desde la mañana del 27 de abril se conocía que una de las centrales térmicas previstas no estaría disponible al día siguiente, sin que se sustituyera adecuadamente.
El punto crítico se produjo a las 12:03, cuando se registró una oscilación «atípica», seguida de otra a las 12:19, ambas en medio de un sistema que ya mostraba signos de tensión desde primera hora. La respuesta técnica del operador del sistema —Red Eléctrica— fue correcta según los protocolos vigentes, pero resultó insuficiente para contener la creciente tensión. Una cadena de desconexiones automáticas en infraestructuras clave, muchas de ellas indebidas, acabó provocando el colapso.
La vicepresidenta ha insistido en que el sistema no contaba con capacidad suficiente para el control dinámico de la tensión, ya fuera por falta de programación o por un mal cumplimiento de las normativas técnicas por parte de las instalaciones. Además, las medidas adoptadas para gestionar las oscilaciones contribuyeron involuntariamente a la situación crítica.
Ante esta situación, el Ejecutivo ha anunciado un paquete de actuaciones que se aprobarán en el próximo Consejo de Ministros, orientadas a reforzar la resiliencia del sistema. Entre ellas figuran el refuerzo del control sobre los agentes del sistema, la mejora de la planificación de la red de transporte, el impulso al almacenamiento y las interconexiones, así como medidas específicas de ciberseguridad.
«Este informe nos permite reflexionar, pero sobre todo actuar», ha afirmado Aagesen, quien ha subrayado que el objetivo es evitar que se repita una crisis similar y seguir liderando la transición energética como vector clave de crecimiento, empleo y autonomía estratégica.
Redacción: StickNoticias.es
